El término “Drifting” puede significar “andar a la deriva”. Un transito por la ciudad con desarraigo cívico y psicológico para poder revalorar lo que se ha hecho por ella y lo que ella a hecho por si misma. Alajuela Drifting es un ejercicio mental para remapear la geografía pública de esta ciudad y documetar todas las ciudades imaginadas dentro del distrito primero: “La Ciudad de los Mangos”, “La Ciudad de los Locos”, “La Ciudad de los Apodos”, etc.
En las fotografías la presencia de sus habitantes es mínima, el resultado es un bestiario cívico, escenográfico y cáustico que va de la mano de un urbanismo no estructurado, carente de visión integral y de tendencia propagandística en un intento por levantar un imaginario que se sienta ajeno a la mayoría. La imagen de Alajuela se desarrolla como un trampolín político y panfletario, una ciudad ingeniosa pero no ingeniada; un imaginario fantástico de héroes y batallas incendiarias, “anecdotocratica” y chotera.
La presente exhibición funciona al mismo tiempo como documento y como objeto de contemplación. En este contexto Alajuela Drifting quiere crear una estética alrededor de la “otra” ciudad, la que ha faltado en construir una identidad, en parte por la carencia de desarrollo integral y orden urbano, como también, por carecer de un análisis y de un diálogo multidisciplinario apropiado que concuerde con el discurso de “misión”-“visión” que promueve su gobierno local y que intenta propiciar las más altas y más retribuyentes aspiraciones políticas.
Durante mas de quince años la visión se ha mantenido evolucionando y ha pasado de lo oscuramente pesimista y abrumador hasta la visión más positiva y colorida que ha nacido de la evaluación y aceptación de este imaginario histórico e inmediato. Mucho ha desaparecido y evolucionado en 15 años y la ciudad continua transformandose y estabeciendo sus nuevos rasgos y coordenadas.
A nivel técnico se produjeron algo más de un centenar de imágenes de las cuales se muestran sólo 16. Se utilizaron 4 sistemas operativos, igual número de cámaras y se descartaron al menos más de 500 imagenes.
Complementario a la exposición de las obras, se ofrecerá la posibilidad de crear visitas virtuales en distintos formatos y discusiones en línea con el deseo de aumentar el impacto de la exposición y el Museo en el público nacional e internacional. La solicitud para la sesión se puede hacer a través del evento creado en las redes sociales.