Gran mural del reconocido artista Otto Apuy engalana el nuevo anfiteatro de la Universidad Fidélitas en Heredia

  • La obra se conecta con el espectador como un gran telón lleno de formas geométricas, colores vivaces y significados personales.

La Universidad Fidélitas inauguró recientemente un moderno edificio en su campus de Heredia.  A un costado de él se construyó también un anfiteatro al aire libre que busca ser un centro de encuentro y promoción del arte y la cultura.  Precisamente, como parte de esta iniciativa, un gran mural abstracto de cerámica, del reconocido artista Otto Apuy, es el protagonista permanente de este sitio, que como un gran telón, pretende resguardar y acompañar a la gran comunidad universitaria y a los  diferentes visitantes del lugar.

Según el artista, el diseño de esta obra de 20 metros de largo por 1.70 de alto, cuya técnica es el trencadisc (nombre catalán que significa quebrar cerámica), toma en cuenta varios factores; uno muy importante el hecho de que esta zona se había caracterizado por un desarrollo basado en sus cafetales.  Por lo tanto, su primera tarea fue interpretar el espacio (que está por encima del objeto mismo) y plantear una idea integradora del paisaje, de lo arquitectónico, lo urbano y la naturaleza.  En otras palabras, la armonía del entorno es una energía que pertenece a la identidad del lugar, donde más bien las formas del mural vienen a integrarse. 

“Así, hemos concluido una obra abstracta armónica utilizando una serie de formas, direcciones y pintorescos colores como el azul, el rojo, el verde, que son parte de nuestra identidad. Asimismo, hay líneas piramidales como las montañas y los volcanes, líneas onduladas que sugieren las lomas, el sol sugerido por una rueda, el arco iris es una metáfora”, explicó el artista al referirse a la obra. “Y esto que vemos en estas paredes, es una confabulación mágica in situ, una secuencia de símbolos geométricos, que sobre todo apelan al observador.  No existe una forma figurativa, no es algo específico.  Todo lo contrario, es una relación de objeto y espectador, donde cada persona interpretará el mural en función de lo que significa en su mente, en sus correlaciones y eso le permite entonces darle su propio significado” agregó Apuy.

“Ojalá todas las instituciones le regalaran arte a sus visitantes”

Una de las cosas que recalca el muralista es que introducir el arte visual en una institución educativa es parte de la belleza de la misma educación, porque ambas, educación y arte son un excelente binomio para conseguir un mejor individuo, un profesional que tuvo la oportunidad de estudiar viendo este mural.

Otto Apuy, se auto califica como un artista multimedia (comunicador, escritor, pintor, escultor, entre otros).  Asegura que el artista debería ser mucho más abierto a distintas áreas y técnicas del arte.  Ser más integral, porque cada técnica le aporta a la otra. 

Dicho sea de paso, esta técnica del trencadisc la adquirió mientras estudiaba arte en Barcelona y cuando regresó al país fue quien la introdujo y la diseminó.  Una de sus obras más reconocidas con esta técnica es la iglesia de Cañas, su pueblo natal.  Entre las ventajas que posee un mural de cerámica están la durabilidad, la economía, la lectura individual, la frescura que aporta y, al ser un material vidriado,  el movimiento que adquiere durante el día por las diferentes posiciones de la luz y el brillo.

Otto Apuy Sirias nació en Cañas, Guanacaste, el día 31 de julio del año 1949. Realizó estudios de Comunicación en la Universidad de Costa Rica y de arte en Bercelona, España, donde residió muchos años. Desde 1970 fue redactor en el Semanario Universidad. Fue Premio Nacional Aquileo J. Echeverría en 1977. Fue declarado como hijo Predilecto de la ciudad de Cañas y a lo largo de su carrera ha recibido importantes reconocimientos. Colabora en diferentes periódicos y revistas con escritos sobre artes plásticas y literatura.

Sobre el nuevo anfiteatro florense:

Este anfiteatro que está en el campus de la Universidad Fidélitas en San Francisco de Heredia mide 475 metros cuadrados y tiene capacidad para 380 personas sentadas.   Tal y como lo explicó Greivin Víquez, director administrativo de la sede, es una nueva infraestructura para llevar a cabo sus diferentes actividades culturales. 

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