A cargo de Susana Sánchez Carballo
Via Zoom
Sesiones del taller:
* Martes 26 de mayo, 17:00 - 18:00
* Martes 02 de junio, 17:00 - 18:00
* Martes 09 de junio, 17:00 - 18:00
Este taller de tres sesiones busca crear un espacio de reflexión en torno a obras y procesos de artistas que desafiaron los relatos normativos sociales y culturales en Costa Rica. A través de una mirada feminista, se propone analizar estudios de caso que permitan reorganizar la historia del arte local. Estas microhistorias apuntan a imaginar colectivamente otras maneras de nombrar, valorar y visibilizar experiencias creativas atendidas muchas veces de forma inadecuada e insuficiente.
Este taller se realiza en el marco de la exposición Vea con el ojo ciego, de Sila Chanto, que por motivos del cierre de nuestro espacio no ha podido ser oficialmente inaugurada.
Para inscribirse enviar un correo a paulapiedra@teoretica.org
CUPO LIMITADO
Vea con el ojo ciego
Sila Chanto (1969-2015)
Curador: Miguel A. López
Sila Chanto (1969-2015) fue una artista visual y poeta costarricense. Para ella el arte era un vehículo para inducir formas de tránsito emocional, físico o mental. Sus obras examinaron la (im)posibilidad de la convivencia, los límites de la comunicación, la enfermedad y la muerte, el erotismo femenino, la violencia y dominación social, entre otros asuntos. Si para Chanto el punto de partida fue el grabado, es porque ella comprendió la dimensión afectiva y política de la huella: la memoria de las manchas y fluidos, las evidencias del cuerpo ausente, las marcas que se inscriben en la piel o en muros y paredes. Chanto hurgaba en las cosas buscando destellos de vida. “Creo que las personas dejan su energía en los objetos” dijo en 1999.
El título cita el nombre de su poema e instalación gráfica *No vea con el ojo ciego* (1998). Aquí invertido, “Vea con el ojo ciego” es una invitación a mirar a través de la pupila herida y el abismo que habita en su trabajo. Esta es la primera revisión curatorial de su trabajo luego de su temprana partida en 2015. Incluimos obras tempranas, así como piezas inéditas o pocas veces vistas, lo cual permite explorar aspectos poco atendidos de su producción.
Desde fines de los ochenta, Chanto ha creado cuerpos-mancha, cuerpos-casa, cuerpos-poema, cuerpos-herida y cuerpos-grito como alegorías de organismos que se resisten a desaparecer y de identidades que son movimiento constante. Es en el precario equilibrio entre la presencia y el vacío donde habita el motor de su deseo. O para decirlo con sus palabras: “Escasamente soy / y no me basto”.