El MADC cierra sus puertas como preparación para su 25 aniversario
Museo estará cerrado desde el 17 de noviembre de 2018 hasta el 14 de febrero de 2019.
Esta será la primera intervención profunda al edificio desde su inauguración en 1994.
El Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (MADC) está ubicado en las instalaciones de la antigua Fábrica Nacional de Licores (FANAL), fundada en 1856. Este es uno de los sitios de mayor valor arquitectónico y patrimonial de Costa Rica y se sitúa en una importante zona histórica del centro de San José. La antigua FANAL, luego de su restauración a inicios de la década de los noventa, se convirtió en el Centro Nacional de Cultura (CENAC), sede del Ministerio de Cultura y Juventud y varios de sus órganos adscritos.
Antecedentes:
La FANAL fue una de las grandes obras públicas que se realizaron en la administración del Presidente Juan Rafael Mora Porras en el siglo XIX. Actualmente, preserva gran parte de su estructura original, un diseño que recuerda en gran medida las edificaciones de la época colonial.
Después de una serie de adecuaciones y remodelaciones a este espacio, en 1993 se trasladaron las oficinas administrativas del Ministerio de Cultura y Juventud. En octubre de ese mismo año, mediante el decreto No.22626-C, el edificio fue declarado de interés histórico-arquitectónico. Meses después, el 21 de febrero de 1994, se inauguraron las demás áreas que completaban el complejo arquitectónico para albergar dos teatros y un anfiteatro, además de la Compañía Nacional de Danza y el MADC.
Dentro del grupo de instalaciones del CENAC, el MADC cuenta con un espacio físico de aproximadamente 1200 m2, que incluye 5 salas expositivas, dos acopios y depósitos para sus colecciones, taller de museografía, oficinas administrativas, terrazas, la Pila de la Melaza y el Tanque.
La remodelación:
Desde 1994 hasta hoy, los espacios del Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (MADC) han mutado en canchas de fútbol, capillas y hasta rampas para patinetas. Los visitantes han caminado por el centro de San José y visto sus vitrinas, sin salir de Sala 1. También han visto suspendida una piedra descomunal en el medio de la Pila de la Melaza y ahí mismo, tiempo después, estuvo un carrusel funcionando con todas sus luces. Pero este 17 de noviembre pasará algo que no ocurre desde la inauguración del MADC: cerraremos, solo por tres meses.
El cambio total del piso y del techo del Museo será la razón por la cual se cerrarán las puertas hasta el 14 de febrero del 2019, fecha en que se realizará el primer Art City Tour del año. La última restauración profunda realizada al inmueble fue hecha en 1993, cuando se acondicionó la Antigua Fábrica Nacional de Licores (FANAL) para albergar el Centro Nacional de Cultura (CENAC).
“¡Son 24 años, no es poco! Para que se den una idea de todo lo que ocurre en 24 años: hemos tenido 8 presidentes de la República. Ha llovido, sobre nuestros techos, una cantidad de agua equivalente a 14 piscinas olímpicas. Hemos desarrollado un ‘cuero’ sobre nuestras paredes -producto de todas las capas de pintura de todos los montajes que hemos hecho- de más de dos milímetros de espesor. Y nuestros visitantes, en todo este tiempo, han recorrido una distancia superior a dos veces la circunferencia de la tierra”, afirma el museógrafo del Museo, Arq. Osvaldo López.
Este proyecto de restauración incluye también las oficinas administrativas, donde se ha trabajado desde setiembre. Allí se cambió el piso, el mobiliario, el cableado de telecomunicaciones y eléctrico (con tomacorrientes de grado hospitalario), todo debidamente entubado y a prueba de incendios. El criterio para escoger el piso de las salas se basó en lograr espacios museográficos más limpios, ya que tiene menos sisas y el color es neutro -gris-, además de su durabilidad ya que es de alto tránsito. Con respecto al techo -aparte de cambiar las láminas de zinc- se repararán goteras y filtraciones que no se habían podido intervenir anteriormente. Se entubará el cableado expuesto y se colocará aislante térmico para atenuar la sensación de calor y sonido en las salas.
Las obras totales abarcan un área de 1.400 metros cuadrados y cuentan con un presupuesto de 80 millones de colones.
Si las celebraciones del XX aniversario giraron en torno a su colección con una actitud revisionista de la región centroamericana, el 25 aniversario será más introspectivo. El Museo dirigirá la atención hacia su contenedor, espacio espléndido que por un cuarto de siglo ha albergado un sin número de proyectos de arte contemporáneo y diseño. Y a su interior, donde dedicará grandes esfuerzos para revisar sus políticas y los protocolos ligados a su colección permanente encaminados a un mejoramiento de su gestión y apertura.
Así es como el MADC cierra sus puertas para prepararse para las actividades de su 25 aniversario; que incluirán, además del inmueble remozado, exhibiciones, eventos teóricos, proyectos nuevos de investigación y un programa de autoevaluación a lo interno.